Por orden del Ministerio de Seguridad que dirige Patricia Bullrich, la Policía de Seguridad Aeroportuaria se presentó en la justicia para denunciar a la conductora Tamara Pettinato y a su pareja el ex jefe de la PSA, José Glinski, para determinar si cometieron delitos y si existió uso indebido de bienes públicos.
La presentación de la denuncia, que se formalizó este jueves, recayó en el juzgado federal de Lomas de Zamora a cargo de Federico Villena. La PSA quiere que se investigue si Pettinato recibió un tratamiento VIP por parte de la fuerza cuando tenía que usar aeropuertos para viajar al interior o el exterior del país. E incluso si tenía un auto que pertenecía a la fuerza para uso personal.
Esa información sobre un presunto tratamiento personal para la panelista fue contado por la periodsta Mercedes Ninci quien detalló movimientos de Pettinato en los aeropuertos. Según dijo, accedía al área de Migraciones sin hacer colas ni esperar y además era recibida por una camioneta utilitaria cuando arribaba a su destino, que la trasladaba a diferentes lugares.
En la denuncia de la PSA también se pide que se investigue para qué se usaba una propiedad ubicada en Martínez, la zona norte del conurbano, que el Estado le habría entregado a la fuerza. La propiedad había sido allanada y confiscada a una banda narco y entregada a la PSA. Tenía pileta y parque y, según versiones, habría sido usada para realizar presuntas fiestas.
La casona de PSA expropiada a un clan narco y que se utilizaba para fiestas en Martínez.La denuncia también pide que se determine si el avión de la PSA fue usado para «cuestiones personales» y si se adulteraron los registros para ocultar a los pasajeros. La PSA cree que no dejaban en los registros el nombre de Pettinato.
Glinski, ex jefe de la PSA, hoy es diputado nacional del kirchnerismo. Está en pareja con Pettinato y cuando salieron los videos de la panelista de espectáculos junto a Alberto Fernández, él la recibió en Comodoro Rivadavia, de donde es oriundo.
Clarín ya había adelantado que la PSA, a cargo de Alfredo Gallardo, había inciado un sumario interno para deteminar si existieron irregularidades en la gestión de Glinski. La denuncia judicial, que lleva la firma de Galllardo y del sub jefe de la fuerza Miguel Angel Martino, va en paralelo de ese sumario administrativo y es una consecuencia. Fuentes vinculadas a Seguridad sostienen que hay evidencias de los presuntos delitos.