El año pasado estuvo caracterizado por ser un mercado desafiante y cambiante para la industria automotriz. Después de un primer semestre preocupante (sobre todo el primer trimestre) las ventas levantaron durante la segunda etapa del año y permitieron cerrar el mercado de manera regular.
Entre las medidas que tomó el Gobierno para el sector se encontraron la mayor flexibilidad para las importaciones de vehículos y la eliminación del impuesto PAIS a partir del 23 de diciembre. La primera generó que ingresen nuevos modelos al mercado argentino y con precios competitivos: un ejemplo es el nuevo Hyundai HB20, un éxito en ventas en Brasil y que recién llegado a la Argentina logró ingresar al ranking de los diez modelos más económicos.
La segunda medida generó cambios en los precios de lista de las automotrices. Algunas decidieron implementarlos de manera anticipado en diciembre, como fue el caso de Toyota (la rebaja rondó el 3% en modelos importados y de un 1% en los producidos localmente) y Ford (un 1%). Otras compañías decidieron aguardar para realizar modificaciones o directamente congelaron sus precios para los meses de diciembre y enero, respectivamente.
General Motors bajó los precios directamente en enero, con cambios que impactaron de manera sustancial en casi todos sus modelos. En el caso de su modelo más económico en el país, el Chevrolet Onix (importado de Brasil) disminuyó los precios de su gama un 5% en promedio. La versión Onix 1RS 1.0 T fue la que tuvo el mayor cambio de todo el mercado, con una baja del 6,96% ($1.932.000) respecto a su monto de diciembre.
El resto de la gama también sufrió modificaciones. De hecho la versión de entrada de gama logró entrar entre los 10 autos más económicos de nuestro país y con su versión con caja automática también ingresó en la lista de los 10 automáticos más baratos de enero en la Argentina.
El anuncio de Chevrolet llega en un mercado que se proyecta con mayor volumen respecto a lo que fue el año pasado, ya que las automotrices esperan que se patenten aproximadamente 500.000 unidades, un número mayor a las 414.041 unidades vendidas con las que terminó el 2024, según las cifras que se detallan en el informe de la la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara).
LA NACION
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