La escalada violenta por parte del ELN y las disidencias de las Farc en la subregión del Catatumbo estaría teniendo alcances internacionales, después de que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunciara una serie de medidas para reforzar la seguridad en la frontera con Colombia.
Sin embargo, el mandatario de ese país generó alerta en Colombia, después de que anunciara la presunta visita de su ministro del Interior, Diosdado Cabello, a la zona en conflicto.
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Según indicó Maduro, Cabello se encuentra en la región fronteriza liderando las operaciones de seguridad. De hecho, el jefe de Estado aseguró que el ministro de Venezuela está “al frente de todo” y ha estado informando en tiempo real sobre la situación en la zona.
Aunque no se especificó si Cabello se encuentra del lado venezolano o colombiano de la frontera, Maduro destacó que su presencia es fundamental para coordinar las acciones militares y humanitarias en el área.
“Diosdado, que se encuentra al frente de todos estos procedimientos operativos, está por allá apoyando al pueblo de Colombia en el Catatumbo, pero está en tiempo real informándome de todo”, fueron las palabras de Nicolás Maduro.
Cabello, por su parte, aseguró que Venezuela está comprometida con brindar apoyo a los ciudadanos colombianos afectados por la violencia en el Catatumbo. “Nunca le hemos dado la espalda a Colombia, y menos en tiempos de Revolución”, afirmó.
Asimismo, señaló que el gobierno venezolano ha respondido de manera inmediata a la crisis humanitaria generada por los desplazamientos masivos, abriendo sus puertas a los colombianos que huyen del conflicto.
Sin embargo, horas después de las declaraciones de Maduro, Diosdado Cabello apareció públicamente en el estado venezolano de Zulia, específicamente en el aeropuerto Relámpago, ubicado en la zona del Catatumbo venezolano. Rodeado de militares, Cabello desmintió implícitamente las palabras de Maduro al confirmar su presencia en territorio venezolano.
Durante su intervención, Cabello explicó que se encontraba supervisando un despliegue militar como parte del ejercicio denominado “Escudo Bolivariano”. Según sus palabras, esta operación tiene como objetivo garantizar la paz y la democracia en la región.
“Aquí estamos en el Estado Zulia, en el aeropuerto Relámpago de Catatumbo, en el despliegue ordenado por usted, a todas las fuerzas militares, las fuerzas policiales, y de nuestro pueblo, para este ejercicio ‘Escudo Bolivariano’ por la paz, la democracia. Primer ejercicio de este año”, declaró Cabello.
Entretanto, la escalada de violencia en el Catatumbo, una región históricamente afectada por la presencia de grupos armados, ha dejado un saldo alarmante de más de 100 muertos y al menos 32.000 desplazados, según reportes recientes.
Muchos de estos desplazados han cruzado la frontera hacia Venezuela en busca de refugio. En respuesta, Maduro ordenó reforzar la seguridad en la frontera con un “tapón militar” que incluye la movilización de más de 2.000 soldados en el perímetro de la zona de conflicto.
El presidente venezolano también destacó la importancia de entrenar a las fuerzas armadas para garantizar una “alta capacidad de reacción integral” ante cualquier eventualidad. Según Maduro, estas acciones son necesarias para proteger la soberanía de Venezuela y prevenir la entrada de grupos armados que puedan desestabilizar el país.
Entretanto, desde el Congreso de la República expresaron su rechazo por las declaraciones del régimen venezolano sobre una posible incursión venezolana en territorio nacional.
Tal fue el caso de la senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, que pidió explicaciones al presidente Gustavo Petro sobre la presunta presencia de Cabello en el Catatumbo.
“Según el criminal Nicolás Maduro, su socio el narcotráficante Diosdado Cabello ¿está en el Catatumbo? Esto es de la mayor gravedad para nuestra soberanía. ¿Qué responde Petro? (sic)“, señaló la congresista.
Los ejercicios “Escudo Bolivariano 2025”, que comenzaron este miércoles, representan el primer despliegue militar masivo del año y coinciden con el inicio del tercer mandato de Maduro, cuya reelección ha sido cuestionada por la oposición y desconocida por varios países, incluidos Estados Unidos y miembros de la Unión Europea.
Según el mandatario, estas maniobras tienen como objetivo garantizar la paz, la libertad y la democracia en Venezuela, al tiempo que denunció la existencia de planes de conspiración financiados desde Colombia.
Maduro afirmó que estos ejercicios son una respuesta directa a las amenazas externas y a los intentos de desestabilización promovidos por actores internacionales. “Soberanía que no se ejerce en el territorio, es soberanía que se pierde”, declaró, enfatizando la necesidad de mantener un control estricto sobre las fronteras para evitar la infiltración de grupos armados.
En sus declaraciones, tanto Maduro como Cabello señalaron a Colombia como el origen de varios problemas de seguridad que afectan a Venezuela. Cabello, en particular, acusó al expresidente Iván Duque de haber permitido la expansión del grupo criminal conocido como el Tren de Aragua hacia territorio colombiano.
Según el ministro del Interior, esta organización delictiva, que opera en varios países de la región, representa una amenaza para la estabilidad de ambos países.
Cabello también cuestionó la capacidad de las autoridades colombianas para combatir el crimen organizado y aseguró que Venezuela está dispuesta a colaborar en la búsqueda de soluciones que promuevan la paz en Colombia. “Necesitamos una Colombia en paz”, afirmó, destacando que la estabilidad en el país vecino es fundamental para garantizar la seguridad en la región fronteriza.