Alrededor de 75.000 empleados federales se acogieron al programa de renuncia diferida inspirado por el multimillonario zar de la eficiencia de Donald Trump, una cifra inferior a la que esperaba la Casa Blanca y que aumenta la probabilidad de mayores despidos masivos.
Este total, confirmado por una fuente familiarizada con las cifras, representa aproximadamente el 3% de los 2,4 millones de empleados civiles del gobierno federal. La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, había fijado anteriormente un objetivo de entre el 5% y el 10%.
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75.000 empleados federales aceptaron el plan de renuncia de Trump
El jueves, Leavitt dijo que la Casa Blanca estaba satisfecha con la respuesta.
“No estoy tan segura de que no hayamos alcanzado las cifras que queríamos: 75.000 personas aceptaron el programa de renuncia voluntaria”, afirmó. “Eso va a ahorrar millones de dólares a los contribuyentes estadounidenses, y eso es exactamente lo que queríamos”.
El plan de renuncia diferida, que permite a los trabajadores dejar el trabajo en febrero pero permanecer en la nómina federal hasta fines de septiembre, cerró el miércoles por la noche poco después de que un juez federal de Boston levantara una orden que congelaba el programa.
La administración Trump advirtió en repetidas ocasiones a los trabajadores que la oferta podría ser su mejor oportunidad. Trump ya ha dicho a las agencias federales que se preparen para recortes de empleos.
El plan de Trump para reducir la nómina federal
La fuerza laboral del gobierno federal creció un 6,3% bajo el mandato del expresidente Joe Biden, impulsada por los programas de gasto para la pandemia. Un recorte del 3% a la nómina federal solo reduciría la cifra a los niveles de 2023.
En una orden ejecutiva firmada el martes, con el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, a su lado, Trump ordenó a los jefes de las agencias que “emprendan sin demora los preparativos para iniciar reducciones de personal a gran escala”. Se harán excepciones para la seguridad pública, agencias de inmigración y fuerza pública.
Musk ha sido la fuerza impulsora detrás del esfuerzo de reducir el tamaño del gobierno a través de su llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental.
El programa de renuncia se conoció como “Fork in the Road”, haciendo eco de una oferta similar que Musk hizo a los empleados de Twitter poco después de comprar la empresa de redes sociales, que rebautizó como X.
De hecho, incluso el término del programa mostró la influencia de Musk. La Oficina de Administración de Personal envió un correo electrónico a los empleados federales el miércoles por la noche diciendo que no se aceptarían las renuncias recibidas después de las 7:20 p.m., hora de Washington.
En la costa oeste, la hora era las 4:20 p.m., un número que Musk usa frecuentemente en un guiño a la cultura de la marihuana.
Traducción editada por Paulina Munita.