El Gobierno desplegará tropas del Ejército a las fronteras con Paraguay, Bolivia y Brasil para realizar tareas de “control y vigilancia” en zonas donde no haya puestos fronterizos a cargo de la Gendarmería Nacional, anunciaron altas fuentes del ministerio de Defensa.
El titular de esa cartera, Luis Petri, envió esta semana a su colega de Seguridad, Patricia Bullrich, un proyecto para modificar el decreto 727/2006 de Nilda Garré. El 727 limita a las FF.AA. a combatir solo a otros estados, excluyendo a organizaciones terroristas o del crimen organizado. El proyecto de Petri amplia ese alcance y el ministro espera que el presidente Javier Milei lo firme “la semana próxima”.
El proyecto supone enviar soldados del Ejército -primero a petición del ministerio de Seguridad- en zonas fronterizas en las que no tenga puestos Gendarmería y que son parte de los “agujeros” de los límites argentinos por donde pasan los narcotraficantes y otros delincuentes que forman parte del crimen organizado.
El redespliegue sería a las fronteras con Brasil, Paraguay y Bolivia pero no Chile no es la prioridad, aclararon las fuentes consultadas por Clarín.
Por lo pronto, Petri concurrirá el 29 de este mes a la comisión de Presupuesto de la Cámara de Defensa para defender las partidas asignadas a Defensa para los gastos del año que viene. Al encuentro, podría llevar una maqueta de un avión IA 100 Malvinas para criticar a sus antecesores K con una ironía. “Esa maqueta es lo único que entregó la Fábrica Militar de Aviones del contrato por 10 aviones porque desviaron el presupuesto para pagar el déficit”, suelde decir el ministro.
El plan supone que esos soldados desplegados “colaboren incluso con las fuerzas armadas del Paraguay” que sufren ataques de narcotraficantes en las fronteras y del guerrillero Ejército del Pueblo Paraguayo. Los mayores cargamentos de marihuana llegan a la Argentina desde la ciudad de Pedro Juan Caballero.
Desde el punto de vista legal, Petri no solo se apoyará en la modificación de la “doctrina Garré”, sino también en el decreto ley 15.385 que dice que las Fuerzas Armadas podrán “reforzar” la seguridad de las fronteras. También, en el decreto de la ex presidenta Cristina Kirchner para desplegar militares en el llamado operativo “Escudo Norte” que, a su criterio, «fue un fracaso».
Desde enero pasado, Petri viene anunciando modificaciones a la llamada “doctrina Garré” a la que considere violatoria del espíritu de la ley de Defensa e incluso de la Constitución, pero hasta ahora no logró su sanción.
Petri inauguró formalmente el lunes la XVI Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas en Mendoza, y entre los desafíos de la Defensa mencionó a los “grupos criminales transnacionales, narcotráfico, terrorismo y sus redes de apoyo, la pesca ilegal, la minería ilícita, el tráfico de personas y la quema intencional de bosques, así como los desplazamientos forzados por persecución política o falta de desarrollo, representan desafíos complejos para nuestra región”
Además, dijo ”la presencia de actores extra Hemisféricos (en América Latina) que apoyan regímenes no democráticos, como Irán, es una grave amenaza”, luego de que el gobierno de Javier Milei incluyó a Hamas de Palestina, entre la lista de grupos terroristas en la que ya estaban el Hezbollah del Líbano.
Mientras, no consigue -hasta ahora- consenso su proyecto de modificar la ley de Seguridad Interior en la comisión de Defensa de Diputados para autorizar a las Fuerzas Armadas a combatir el terrorismo y el narcoterrorismo.
Entonces, este decreto sería una alternativa -aunque de menor alcance- para ampliar el rol de los militares ante las nuevas amenazas, como las llama la doctrina militar de Washington.
Desde la época de Carlos Menem miles de efectivos de la Gendarmería fueron sacados de la frontera y enviados al GBA, Rosario y Córdoba, dejando lugares sin control.
Petri recordó a sus colaboradores que hasta el ex jefe del Estado Mayor Conjunto del gobierno de Alberto Fernández, el teniente general (RE) Juan Martín Paleo defendió el “redespliegue del Ejército” a las fronteras al oponerse en Diputados a aquel proyecto de ley. Aunque Paleo se opone tajantemente a que participen del combate al narcotráfico, como sucede en Colombia y México.
Petri estaba esta semana de muy buen humor por los “excelentes” resultados de la cumbre de 20 ministros de Defensa de las Américas en Mendoza. Primero, por la condena a la invasión rusa a Ucrania y un apoyo aparte de Argentina, Estados Unidos, Canadá, Ecuador, Paraguay y Uruguay a los derechos de Israel a defenderse del terrorismo.
Precisamente, en el documento conjunto la Argentina y los principales países de la región coincidieron en “la relevancia que adquieren para la Defensa Nacional, las problemáticas transfronterizas desde su multidimensionalidad”, entre otros consensos. Este concepto coincide con el proyecto de decreto que espera se publique en el Boletín Oficial.
Además, porque completó “el giro de 180 grados” del gobierno de Milei en su alineamiento con la política exterior de los Estados Unidos e Israel. Entre varias reuniones bilaterales en Mendoza, Petri se reunió con la subsecretaria de Defensa de los Estados Unidos, Rebecca Zimmerman.
Y enumera estos avances: pedido de la Argentina de ser socio global de la Organización del Atlántico Norte (OTAN), el operativo “gringo-gauchos”, la venta de los aviones F16, la reanudación de la participación de la Armada en el operativo naval Unitas y el acuerdo de Ciberdefensa.
También, la participación de dos oficiales de la Armada en la fuerza naval combinada para dar seguridad marítima en el Mar Rojo frente a la amenaza de los piratas hutíes. Y espera, con ansias, que en diciembre llegue el primer F16 de entrenamiento y un simulador para que la Fuerza Aérea empiece a “recuperar su capacidad supersónica” que perdió en el 2016 con las desprogramación de los Mirage.