Originalmente, el carnaval en Montevideo era un espacio donde había pluralidad de voces y existían murgas de diversas ideologías, incluidas las de derecha, como las murgas pachequistas.
El Estado no intervenía en el Carnaval y existian voces mas plurales. Sin embargo, con el tiempo, el Estado, a través de la Intendencia de Montevideo, comenzó a financiar el carnaval, imponiendo condiciones que han llevado a un pensamiento más homogéneo, dominado por una perspectiva política específica de ultra izquierda.
El carnaval se financia con dinero de todos
El carnaval uruguayo hoy en dia está financiado con dinero público, con el dinero que pagan los contribuyentes a través de impuestos.
El carnaval en Uruguay es una hoy en día una manifestación que algunos consideran de la izquierda y, sobre todo, de la ultra izquierda, donde el Frente Amplio y sus organizaciones afiliadas como el PIT-CNT, FUCVAM o la FEUU, tienen un fuerte protagonismo.
Carnaval partidario
Ir a un tablado en Montevideo hoy en día puede ser interpretado como asistir a un acto político partidario del Frente Amplio.
Este fenómeno se ve como una forma de dominación cultural por parte de la izquierda uruguaya, que utiliza el carnaval para difundir su mensaje y fomentar ideas afines a su ideología. Lo peor de todo: lo hacen con dinero de gente a la cual no le gusta el carnaval. Con dinero de todos.
Financiamiento público
El carnaval, especialmente en Montevideo, se financia significativamente con dinero proveniente de los impuestos de los contribuyentes.
La Intendencia de Montevideo invierte millones de pesos anualmente en el mantenimiento del carnaval. Se utiliza el Teatro de Verano, propiedad de la intendencia, como escenario principal, y se destinan fondos considerables para premios y menciones.
Por ejemplo, en enero de 2024, se otorgaron más de $1.200.000 para premios y menciones del desfile inaugural en la avenida 18 de Julio.
La Coalición también es responsable
No solo la Intendencia de Montevideo financia el carnaval; empresas estatales como Antel y el Banco de la República también aportan.
| La Derecha Diario
A pesar del cambio de gobierno en 2020 con la asunción de Luis Lacalle Pou, el financiamiento público al carnaval no se ha detenido, y se sigue viendo publicidad de Antel en los tablados de Montevideo.
Malgasto absoluto
Mientras Montevideo enfrenta problemas como la recolección de basura y altos costos del transporte público, la Intendencia, bajo el control del Frente Amplio desde 1990, sigue destinando millones a un carnaval que algunos ven como decadente y que, según críticas, promueve ideas contrarias a la libertad, la propiedad privada y los derechos individuales, favoreciendo el estatismo y el colectivismo.