El ex juez kirchnerista, Raúl Eugenio Zaffaroni, advirtió por las consecuencias que pueda tener los nombramientos por decreto del presidente Javier Milei de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla para integrar la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
«Los jueces de la Corte van a firmar junto con personas que no están nombradas constitucionalmente, lo cual constituye para los que no están nombrados en usurpación de funciones«, expresó en AM 750.
El ex juez explicó que no es un delito instantáneo, pero que el día que dejen de ejercer las funciones usurpadas, comienza a prescribirse penalmente.
«Esto no pasó nunca. Nunca hubo en un gobierno constitucional, y ni siquiera hasta 1955 con el gobierno de facto que un juez de la Corte no cuente con nombramiento conforme al acuerdo del Senado», manifestó.
Al tiempo que advirtió que, en el futuro, «las sentencias pueden ser nulas o anuladas».
Zaffaroni expresó además sus dudas respecto a si los actuales miembros, Carlos Rozenkrantz, Ricardo Lorenzetti y Horacio Rosatti, van a tomarle juramento a Lijo y García-Mansilla porque también estarían participando de un delito.
«Puede representar sentencias nulas en algún momento, es el colmo de algo que viene de hace tiempo, no de ahora, no solo responsabilizo a Milei de esto, a nadie se le ocurrió racionalizar la estructura del Poder judicial», sentenció.
El ex magistrado también recordó que Mauricio Macri había utilizado la misma herramienta en 2016 para ungir a Rosatti y a Rosenkrantz, pero finalmente los jueces asumieron con el aval de los dos tercios del Senado, que esta vez el Gobierno no consiguió para los postulantes que promovió.
«Los dos que quiso nombrar por decreto Macri no asumieron porque según trascendió la propia Corte le dijo al gobierno: ‘No nos metan en un lío, así no, nos meten a nosotros en un problema’. Bueno, si uno está firmando una sentencia con alguien que dice que es juez y usurpa la función, participa en un hecho de usurpación de funciones», insistió Zaffaroni.
Hasta el momento se desconoce la postura de los actuales tres miembros del máximo, quienes deberán tomar juramento a los dos miembros designados por el Ejecutivo.